Artritis en personas mayores

Artritis en personas mayores

La artritis es la inflamación de una o varias articulaciones, provocando rigidez y causando dolor a quien la sufre. Las articulaciones son los que ayudan a que se produzca el movimiento. Pueden ser las caderas, los codos, los nudillos de las manos y las rodillas. Aunque esta enfermedad no tiene cura, sí hay maneras de hacerla más leve y llevadera.

La más propensa en personas mayores es la artritis reumatoide, la cual ocasiona inflamación en varias articulaciones y con posibilidades de causar deformaciones. Habitualmente se produce por desgaste o deterioro del cartílago.

La artritis la podemos confundir con la artrosis, pero tienen dos diferencias muy destacadas: el origen y la zona de afectación. Ambas patologías pueden perturbar a las articulaciones, pero solo la artritis puede llegar a los órganos.

Asimismo, la artritis es inducida por inflamación y la artrosis por el desgaste; por lo tanto, sus tratamientos también son distintos. Por ello, al ser dos patologías distintas, se puede tener artrosis y artritis a la vez.

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Causas de la artritis

Se conoce que la artritis es una enfermedad autoinmune. Esto quiere decir que, es el sistema inmunitario el que ataca a las articulaciones produciendo daños e inflamación en las mismas.

Estudios han observado que ocurre por ciertos factores genéticos, hormonales y medioambientales a través de mecanismos que aún se siguen investigando. En el momento en el que el sistema inmunitario colapsa y comienza a atacar los tejidos de su propio cuerpo, se genera la enfermedad. Aun así, hasta hoy en día aún se desconoce exactamente qué es lo que provoca la artritis reumatoide y otros tipos de esta patología.

Sí es cierto que, factores como el consumo de tabaco y la obesidad son factores de riesgo para esta enfermedad. Asimismo, las personas mayores tienen más riesgo de artritis debido al desgaste o deterioro del cartílago.

Síntomas artritis reumatoide en personas mayores

Debido a que la artritis reumatoide, como ya se ha dicho, es la más común en personas mayores a 40 años, nos centraremos ahora en ella.

Como hemos comentado, la causa más frecuente entre las personas mayores es el deterioro o desgaste del cartílago. Esta degradación puede suponer que en determinados momentos los huesos entren en contacto, ocasionando los síntomas característicos de la artritis reumatoide:

  • Dolor crónico.
  • Inflamaciones esporádicas.
  • Hinchazón y rigidez en las articulaciones o alrededores de las mismas.
  • Problema para la movilidad de las articulaciones.
  • Enrojecimiento en la zona afectada.
  • Aparición de nódulos o bultos debajo de la piel, alrededor de las zonas afectadas.
  • Posibles cuadros de fiebre.
  • Cansancio.
  • Falta o pérdida de apetito y reducción de peso.

Las zonas más afectadas suelen ser:

  • Manos.
  • Muñecas.
  • Pies.
  • Codos.
  • Rodillas.
  • Hombros.
  • Tobillos.
  • Y demás articulaciones del cuerpo.

Los síntomas pueden durar entre unas horas y unas semanas. En caso de padecer un síntoma y ver que en unos días no se mejora, se debe contactar con el médico para ver posibles maneras de frenar la situación.

Consecuencias de no tratar correctamente la artritis en las personas mayores

Las consecuencias de no tratarla correctamente en personas mayores pueden ser:

  • Deformaciones en articulaciones.
  • Destrucción parcial de las articulaciones afectadas.
  • Huesos, ligamentos y/o tendones dañados o fracturados.
  • Incapacidad de movimiento.
  • Evolución de otras enfermedades y patologías.
  • Dificultad para realizar las tareas habituales.

Estos síntomas impiden que lleven una actividad normal debido a la artritis, pero con el tratamiento correcto y el apoyo del servicio de cuidados a domicilio pueden recuperar su calidad de vida.

Diagnóstico y tratamiento de la artritis reumatoide en mayores

El diagnóstico se realiza a través de exámenes médicos físicos y pruebas médicas como análisis de sangre y TAC. Es una enfermedad crónica y progresiva que actualmente no tiene cura.

Sin embargo, constan ciertos fármacos, técnicas y consejos que pueden ayudar a controlar el dolor producido por la enfermedad.

  • Uso de medicamentos antiinflamatorios como el paracetamol.
  • Aplicación de calor.
  • Realizar sesiones de fisioterapia.
  • Si el paciente presenta obesidad, es importante perder peso.
  • Ejercicio suave para personas mayores como el yoga, ya que habitualmente se practica con movimientos lentos.

En casos más extremos, los tratamientos suelen complementarse con:

  • Inyecciones de ácido hialurónico para disminuir la pérdida de tejido y cartílago.
  • Inyecciones de cortisona para oprimir la inflamación y el dolor.
  • Cirugía para optimizar la movilidad de la zona afectada, como la incorporación de una prótesis.

Prevención de la artritis reumatoide en personas mayores

Contar con el apoyo de un cuidador o cuidadora es clave para garantizar su seguridad, salud y bienestar.

En caso de que los familiares no tengan el tiempo necesario para cuidar de la persona mayor, nuestros cuidadores de Salutte estarán a disposición y ayudarán a la persona mayor a disminuir el dolor que le produce la artritis.

Podrá realizar con él/ella actividades acordes a su estado como son el yoga, estiramientos, ejercicios de respiración, etc. Además, le ayudará en aquellas actividades que no pueda o no deba realizar debido a la enfermedad de la artritis y le ayudará a llevar una vida acorde encargándose de su dieta y sus hábitos diarios.

Por otra parte, podrá acompañarlo/a a las citas médicas que tenga por la artritis o por cualquier otra cuestión.

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