La evaluación neuropsicológica consiste en la valoración de la capacidad de las funciones cognitivas como son la memoria, la atención, el lenguaje, la capacidad visoespacial, las gnosias y las funciones ejecutivas.
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Evaluación de cribado o el screening cognitivo
La evaluación de cribado o el screening cognitivo es la valoración inicial, la cuál puede ser el primer paso para el posterior diagnóstico de demencia. Pero es eso, solo el primer paso en el proceso de evaluación neuropsicológica, consistente en la necesidad de una evaluación más completa del paciente, para su confirmación o no del diagnóstico de forma definitiva.
Principales pruebas de screening
Entre las principales pruebas de screening utilizadas destacan el Mini Mental State Examination (MMSE), el test de dibujo del reloj (TDR) y la prueba de fluidez verbal (FV). Tras la recopilación de esta información, algunos de los principales instrumentos utilizados en la evaluación neuropsicológica de las personas mayores son:
- Memoria: Escala de Memoria Wechsler, Test de aprendizage verbal de Rey, Secuencia de letras y números – WAIS III, Digitos en orden directo e inverso – WAIS III para la memoria de trabajo.
- Atención: Test D2, Prueba de Adiciones Seriadas por Audición Espaciada (PASAT).
- Funciones ejecutivas: Test de colores y palabras (Stroop), Test de clasificación de cartas de Wisconsin, Trail Making Test A y B, Torre de Londres.
- Lenguaje: Test de fluencia verbal y fonológica, Test de denominación de Boston, Token Test.
- Gnosias: Test de Gnosias de Poppelreuter.
- Habilidades visuales espaciales: Test de figura compleja de Rey, Cubos – WAIS III.
Es importante destacar que la evaluación neuropsicológica es un proceso, no sólo trata de administrar las pruebas, por lo que la información proporcionada tanto por el paciente como por otras fuentes como la familia no pueden ser desatendidos. Por ello, es conveniente que el profesional lleve a cabo una pequeña entrevista con el familiar o cuidador más cercano antes de realizar la valoración.
Resultados de la evaluación neuropsicológica
Los resultados de estas pruebas de evaluación neuropsicológica, junto con los hallazgos en pruebas de neuroimagen realizadas por un neurólogo, han sido incluidos en los actuales criterios de diagnóstico de demencias y es lo que llevará a un diagnóstico completo.
La literatura sugiere que uno de los aspectos que conlleva un rápido de deterioro cognitivo es la disminución de actividad física y mental del adulto mayor, siendo el continuo ejercicio de las capacidades cognitivas antes nombradas lo que llevará a la diferencia entre el declive cognitivo rápido y la capacidad de mantener las habilidades cognitivas.
Para ello, la principal intervención hasta ahora conocida es la estimulación cognitiva, la cuál trata de sesiones en las que la persona se mantiene activa trabajando las diferentes funciones cognitivas que va a necesitar en el buen desarrollo de su día a día a través de actividades y ejercicios de memoria, lenguaje, atención…
Es importante destacar que una de las ventajas de esta evaluación neuropsicológica de la que venimos hablando, es que permite proporcionar los datos necesarios para que el profesional de la neuropsicología que lleve a cabo la intervención en estimulación cognitiva con la persona pueda proponer unos objetivos de trabajo y adaptar las sesiones a esta persona.